El Inchik Olljo

Ser extraño, acude a perviviente. Hombrecillo de hermosa y suave cabellera, dorado blanquecina, encrispada, abundante y dorad, ojos grandes circulares y luminosos, cuerpo transparente, tenue, pleno de vivacidad y próximo a la niñez. Camina ágilmente con suma gracia, como halado por el viento.

Mora en los canterinos manantiales, bajo el ruido de las cascadas o el espigar de los riachuelos. Ambular porta musical tamborcillo con el atrae a niñas y mujeres hermosas y casaderas, las que al ser poseídas, coinciden hijos con las características del progenitor, pero con la diferencia de su corpocidad.

Los niños que caen bajo su magia, debido a la melodía de su tamborcillo, son convertidos en otros tantos seres incorpóreos, idénticos a el.

A veces para calmar su ira, se nimetiza en la vitalidad de los toros de los pantanos ("jacha toro"), en otras oportunidades, se suma en la quietud, de los animales hogareños su estado humoristico y retozon la permite descomponer las ruedas de los molinos, enturbiar las aguas cristalinas y mofarse de los viajeros asustadizos o burbujear.

Tras sus fechorías y hazañas, siempre suele volver a su palacio, construido bajo el agua, y enjoyado de diamante y multicolores piedras preciosas.