Amasanga, el dueño de los animales

Una vez en un pueblo decidieron hacer fiesta, entonces los hombres se fueron de cacería, para tomar carne los días de fiesta.

Muchos se fueron, y al poco tiempo juntaron mucha carne, tanta para llenar el piso de dos casas. A dos hermanos los faltaban otros dos días de cacería. Mientras así andaban encontraron un sajino y lo mataron. Después de haberlo matado el hermano menor tuvo ganas de burlarse y le dijo al hermano:-"Hermano, no te parece que este sajino tiene cara de mujer?". El hermano mayor no comprendía lo que estaba diciendo el otro.-"Así es hermano, este sajino tiene cara de mujer" insistió el menor,
riéndose.

Cuando llegaron al ranchito que había hecho para dormir, prendieron el fuego y secaron la carne del sajino. Mientras la carne estaba secándose el hermano mayor se quedo allí para cuidar. Al día siguiente, mientras todos los otros estaban de cacería, llego al rancho un hombre todo lleno de pintas, venia con su lanza y empezó a hincarla en toda la carne que estaba allí ahumándose :"tzac tzac,..." Ahora todos estos animales se irán de nuevo, libres, ¿Por que ayer se han burlado de mi?" dijo ese hombre. Era Amasanga, el dueño de todos los animales, el curaca de todos ellos. Entonces mientras así decía, todos los animales, recobraron su vida, se fueron.

Después le dijo Amasanga al hombre:-"Si quieres salvare la vida a tu hermano, aquí en este hueco grande, esta noche botaras un nido de comejenes, cogiéndolo de encima del árbol".

Desapareció Amasanga y al rato después llegaron al campamento todos los hombres. Se quedaron sorprendidos a l ver que no había mas toda la carne que habían ido juntando. Entonces el que se había quedado les contó como había llegado Amasanga y como los animales recobrando vida se habían ido bajo su mando. Pero no quisieron creerle, se burlaban de el.

Ya de noche se levanto mucho viento y lluvia fuerte también. Se oía Juri Juri que venia cantando por la selva:"Ju-ri ju-ri, ju-ri". Con su voz Juri Juri hacia temblar todo el suelo. Ya llego a la puerta del rancho, no había como salvarse.

Toda la gente estaba durmiendo en el suelo. Entonces el hermano mayor hizo como le había dicho Amasango y se fue a botar un nido de comejenes en el hueco, tapándolo, y este se hizo una gran bola.

El Juri Juri hizo su voz hasta media noche, luego dejo. De mañana, al levantarse, vieron que había desaparecido todo , no había mas el rancho, ni una hoja, tampoco los machetes, todo se había comido el Juri Juri. Entonces los dos hermanos se pusieron en camino, siguiendo el camino que Juri Juri había abierto en medio de la selva, yéndose. Uno iba cargando su lanza, el otro su machete, en ese tiempo aun no habían escopetas. Llevaban esas armas para matar. Así andando llegaron hasta el tronco vació de un árbol llamado Chunchu. Ahí encima, adentro, estaban durmiendo Juri Juri y sus otros diablos. Entonces los dos hermanos a los pies del árbol prendieron un gran fuego, hasta que el tronco del Chunchu mismo empezó a quemar. Cuando ya las llamas estaban devorando el árbol, desde dentro se oyeron los gritos de Juri Juri. Primero desde la punta del tronco cayo un diablo con un solo ojo, después de un rato, otro con una sola mano, luego otro con una sola pierna, después cayo abajo otro sin boca, al rato otro sin pies. Toda clase de diablos caía del árbol. Por ultimo apareció un diablo con cara de viejo, toda picada como por la viruela. Era el curaca, el dueño de todos esos diablos, Amasanga. Los hermanos lo esperaban para matarle a el también cerca del fuego, pero el saltaba de rama en rama con su lanza pintaba de rojo cono sangre:-"¿Por que me matan?" ¡Yo soy Amasanga, el dueño de todos los animales". Así saltando bajo a tierra y ah mismo desapareció.